Un poco de poesía

Como olvidar esa tarde de octubre
En la que entraste a mi vida
solo por curiosidad
Era el instante justo, ni antes ni después
Era la hora, el minuto, el segundo
Y no fue por casualidad

Pasaron los meses, pasaron los años
Juntos navegamos, tu barco y mi barco
Los miedos, la risa, las cosas pequeñas
Distintas culturas, distinto lenguaje
Pero un mismo idioma…el del amor

Y así las cosas, un día de julio
Te fuiste de viaje sin decirme dónde
Un silencio de hielo se me metió en el alma
Y con lágrimas secas te lloré en silencio

Hasta que aquella noche desperté sonriente
Al verte viejo marino timoneando tu nave
Estabas regresando de un viaje no planeado
Quisiste sorprenderme de nuevo otra vez

Te quedaron las huellas de un viaje difícil
Cicatrices que nunca terminan de doler
Pero la vida es bella y merece la pena
Eso te dije la primera vez